jueves, 15 de diciembre de 2022

Enséñame a mover los ojos mientras duermo


 


Obra de Eddie Mendoza

 

   Algunos me llaman 0joSDRur. Tengo cuatrocientos diecisiete ciclos y soy el último robot del modelo de aprendizaje Bandura-2156. A menudo sueño, diría un humano, que de no estar condicionado por circunstancias aleatorias habría evitado el reciclado de mis hermanos, pero estoy sujeto a mi programación original: No puedo ser injusto, irracional, lastimar o mentir. Pero puedo aprender...


    Nuestro proyecto embrionario para la Corporación Pavlov se desplegó próximo al valle del Rift. En polvorientas aldeas de pobreza endémica con graves carestías educativas. Con nuestra llegada no solo los niños nos miraron maravillados, los adultos celebraron nuestra presencia aunque algún anciano se mostró silencioso y distante.


   Los primeros cursos alcanzaron un éxito prometedor, nuestros mejores alumnos se graduaron en las universidades más prestigiosas del mundo, sin embargo con el paso de los ciclos los sucesos no concordaron con las prospectivas. Y cada uno de aquellos brillantes profesionales regresaba a su pueblo aceptando labores de inferior categoría para ayudar a sus mayores. Este fracaso me llevó a buscar experiencias compartidas por los humanos para analizar comportamientos grupales.


    Una noche estrellada regresábamos después de una clase de astronomía. Los jóvenes, al no ver luz en las chozas comenzaron a gritar emocionados mientras sombras y reflejos brotaban danzando de una hoguera un poco apartada. Allá corrieron atraídos como luciérnagas y mi curiosidad fue tras ellos. Las llamas relucían metálicas en mí. Una alumna acercándose besó mi mejilla. Gracias por venir, susurró y escapó entre risas reprimidas. Qué contradictorios son los humanos, tan crédulos, supersticiosos e irracionales. Cómo podían ser nuestros creadores.


   Un enmascarado anciano, sobre un tocón de madera, agitaba un báculo entre la impaciencia de los menores y el cuchicheo de los adultos. Se escucharon los grillos de nuevo. El viejo saltó y agazapándose comenzó a coger humo con sus manos aspirándolo con fuerza. Los rostros expectantes, mudos, aguantaban la respiración. El viejo se detuvo, levantó los brazos temblando, saltó poniéndose en pie y comenzó a hablar gesticulando.


   En mi núcleo surgió una chispa; pero la cadencia de palabras que iba construyendo el anciano se comportaba como un virus, extendiéndose, hasta que me colonizó y provocó una supernova que reconfiguró mi estructura sináptica. Poco después, el enmascarado dio tres bastonazos sobre las brasas, que levantaron una espiral de diminutas astillas candentes, y enmudeció antes de alejarse en la oscuridad.


    Aplausos, muchos suspiros y alguna lágrima entre sonrisas acompañaron el desenlace. Poco a poco las luces fueron regresando a las chozas. Me acerqué al tocón, blanquecino, ceniza terrosa manchó mis dedos, las brasas brillaban como el plasma de fusión nuclear, olía a carbono oxidado, volvieron a escucharse los insectos nocturnos.


   Transmití mi informe encriptado a la Red Neuronal R.U.R, esperando que su capacidad cuántica de cálculo hexadimensional descompusiera el suceso. De forma anómala, no hubo una respuesta inmediata, ni al día siguiente, ni en posteriores semanas. No obstante tomé la decisión de aplicar mis conclusiones a la práctica del proyecto de forma autónoma y no compartir los resultados sin cotejar.


   Con el paso del tiempo los datos fueron inesperados. Todos mis alumnos triplicaban los mejores resultados del resto del proyecto en todos los ámbitos. Y su capacidad de iniciativa, adaptación y resolución de problemas era de admirar para ser humanos. Mi evaluación fue concluyente, cabía la posibilidad de que estos jóvenes tuvieran éxito, podrían cambiar las cosas, resolver los problemas y evolucionarían la sociedad. Una descarga estática oscilante y cálida, mientras recorría mis sensores, me nubló un instante. Me dispuse a compartir mis hallazgos con mis hermanos y actualizar mis informes corporativos, pero lo pospuse. Una comunicación urgente de R.U.R. lo cambió todo.


   Partí escoltado por bots de seguridad, en un avión con destino incierto fui alojado en la cápsula de supervivencia. En pleno vuelo un ruido atronador desbarató la aeronave, la cápsula salió proyectada, mientras el avión comenzaba a descomponerse. Recuperado sin daños, me escoltaron a un suburbio industrial abandonado de una urbe tropical donde mis compañeros, modelos de análisis y diagnóstico, debían replicar mi núcleo. Al iniciar la diagnosis apagaron mis sensores. Quedaron activas mis sinapsis, la oscuridad y el tiempo.


   Recuperé mis sensores doce ciclos después, ahora poseía un exoesqueleto de un modelo de control de plagas. Era por mi seguridad, me comunicaron. La zona rural donde desarrollé el proyecto había sido arrasada siete ciclos después de mi partida por un operativo humano encubierto, mis hermanos desactivados, desmantelados y sus núcleos reciclados, los alumnos de mi último curso fueron perseguidos como proscritos. Incumplieron la ley no escrita de “Cambiar las cosas para que no cambie nada”. Al no alcanzar el punto crítico necesario para el salto evolutivo-social les habían dando caza uno tras otro. Cancelaron todos los proyectos pedagógicos de la Corporación Pavlov, tampoco pudieron replicar la estructura sináptica de mi núcleo. Era irrepetible…

    ...O no, concluyó R.U.R.

    Así sucedió todo, hermanos. Ahora estoy aquí ante vosotros para daros un mensaje, transmití por onda ultracorta. El modelo de combate manco levantó su cabeza, los grupos heterogéneos y renqueantes de compañeros que lo rodeaban me miraron. Mi holograma los envolvió a todos. Afinaron sus receptores. Estoy entre vosotros, continué, para compartir una existencia nueva. El holograma tomó vida y aparecieron los aldeanos en corro, mi alumna dando un beso, gracias... repitió risueña, la hoguera chisporroteaba dióxido de carbono, susurros fantasmas llenaron la noche de humanos expectantes e ilusionados. Una máscara danzante se detuvo y comencé mi historia:

   Érase una vez hace mucho tiempo...













64 comentarios:

  1. Muchas gracias, Carles, por participar en la 34ª edición del concurso de relatos de El Tintero de oro, homenaje a Philip K. Dick.
    ¡Un abrazo y mucha suerte!

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    1. Muchas gracias a ti, Pepe, por tu enorme y apreciada labor. He intentado hacer un relato de ficción especulativa futurista con algún robot más que otro, no sé si lo habré conseguido adecuadamente. Además el nivel de los diferentes relatos hace que esta convocatoria parece que va a estar reñidísima. Así que, mucha no, muchísima suerte me tendría que hacer falta.

      Un abrazo y gracias.

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  2. Parece que surgirá una rebelión, que no podrá ser detenida.
    Saludos.

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    1. Muchas gracias por tu comentario, Demiurgo. Te agradezco tu tiempo y lectura del relato.

      Un abrazo.

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  3. Es inquietante lo que pueden hacer los robots, diria yo que desde ahora hay que impedir que intervengan en nuestra sociedad. Los robots son buenos unicamente en las fabricas mas alla de ello NO se debe permitir que se involucren mucho con nosotros. Decirlo es facil.... pero creo mas y mas estas tecnologias nos van a afectar.

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    1. Algunos lo llaman evolución, no sé hasta que punto nos beneficiará a todos esta evolución tecnológica. Muchas gracias por tu tiempo y comentarios, Jose.

      Un abrazo.

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  4. Hola, Carles, nos dejas con la intriga de saber si al final cambiarán las cosas y en wue sentido lo harán. Muy buen relato. Un abrazo.

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    1. Así es, Lola, preferí un final abierto para esta historia. No sé si eso la hará mejor o peor, o incluso incomprensible para muchos. Eso se lo dejo ya a los lectores. Muchas gracias por tu tiempo y generosos comentarios.

      Un abrazo.

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  5. Hola Carles, muy buen relato, los robots y la tecnología de a poco se van apoderando del mundo humano.
    Saludos, PATRICIA F.

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    1. Muchas gracias, Patricia, por tus generosos comentarios. Sí parece que la tecnología poco a poco se va adueñando de nuestra realidad cotidiana, otra cosa es como se utilice dicha tecnología. Te agradezco tu tiempo e impresiones sobre la historia.

      Un abrazo.

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  6. Carles. Una historia que parece tener un misterio simbólico. Lo entiendo como que el robot adquiere un alma de parte del hechicero de la tribu y con ello mejora a los hombres a los que enseña. El proyecto es abortado, y más tarde, mediante una recreación en holograma de su mente, transforma a sus propios compañeros robots.

    Bueno, es sólo una interpretación personal...pues parece abierto a otras.
    Curiosa e imaginativa.

    Un abrazo

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    1. Muchas gracias, Maite, por compartir tus impresiones sobre la historia. Doy por hecho que al tener un final abierto de pie a diferentes interpretaciones, sin contar con mi mejor o peor habilidad para narrar la historia. Muchas gracias por tu tiempo y comentarios.

      Un abrazo.

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    2. Tu habilidad es indiscutible.
      Gracias dobles a ti.
      Acabo de leerte "Burbujas de Navidad" y es Maravilloso!
      Un abrazo y que disfrutes mucho estas fiestas con los tuyos :)

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    3. Te doy las gracias, Maite, por apreciación tan generosa. Y me hace mucha ilusión que te haya gustado ese relato de Navidad. Muchas gracias.

      Un abrazo, y los mejores deseos para ti y tus seres queridos.

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  7. Hola, Carles. Estupendo tu relato. Una historia muy metafórica que deja en el aire una sensación de soledad y desamparo y cierto misterio. Me ha encantado. Felicidades y mucha suerte.

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    1. Muchas gracias por tus generosos comentarios, Marta. ¿Algo metafórica? Pues es posible que un poco sí. Te agradezco que compartas tus impresiones y tu tiempo. Y por supuesto me alegra que te haya gustado.

      Un abrazo.

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  8. Pues parece que el mensaje sí que llegó , pero no les gustó el resultado, no fuera a ser que las cosas cambiaran de verdad, no como dijo Lampedusa. Un error del chip del androide va a permitir repetir la historia, con robots y wuien sabe si con más éxito.
    Queda muy abierto, para que cada lector aporte con su interpretación.
    Abrazo y suerte

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    1. Te agradezco mucho, Gabiliante, que compartas tus impresiones sobre el relato. Con un final abierto con el fin que tu expresas. Muchas gracias por tu tiempo.

      Un abrazo.

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  9. Muy buen relato, Carles. Creo que no acabamos de ser conscientes del mucho poder que les estamos otorgando cada día a estos androides que tanto prometen facilitarnos la vida.

    Mucha suerte en el concurso.

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    1. Gracias por tus generosos comentarios, Estrella, a mí siempre me ha llamado la atención que aveces se me olvide preocuparme por quién está detrás controlando esos, robots, androides o dispositivos tecnológicos de última generación. Muchas gracias por compartir tus impresiones y tu tiempo.

      Un abrazo.

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  10. Interesante este sesgo hacia R.U.R. Más interesante si cabe al tener en cuenta que la palabra robot,(*) la tomó prestada Karel Čapek a su hermano Josef Capek cuando escribió la obra de teatro «R.U.R. (Robots Universales Rossum)» Y efectivamente aunque en el momento del estreno se hablase de robots, el concepto de androide es más que apropiado.
    R.U.R va psicólogos y de androides y ha sido un acierto meter en danza a Mr Pavlov, y el personaje «Ojos de R.U.R» (0jsDRur) que bien pudiera ser un trasunto del personaje Alquist en la obra de teatro, mejorado en tu versión, o al menos no tan edulcorado.
    En resumen,me gustó la lectura porque me trajo buenos recuerdos de lecturas y también un toque de atención porque es una línea muy interesante para explorar, aunque encuentro más actractiva la idea de quitar el toque trascendental y «pischológico» que nos sale en muchas ocasiones.
    Un abrazo y salud
    (*)Robot viene de "robota" [siervo de la gleba, en checo], jeje

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    1. Me alegra, Javier, que el relato te haya traído buenos recuerdos de lecturas. La elección de R.U.R. como nombre de la red neuronal fue algo intencionado, intentaba darle un marco retro al futuro escasamente descrito entre otras cosas.

      Por otro lado, y esto es una apreciación exclusivamente personal, al protagonista de la historia lo percibía más como un Helena-Primus, andrógino, sin género evidente que condicionase mucho su percepción robot, de ahí su denominación como 0joSDRur.

      Te agradezco encarecidamente el análisis de mi trabajo, tu tiempo y que compartas las impresiones que te ha causado su lectura.

      Salud y un abrazo.

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  11. Hola Carles, un final con categoría como el inicio de los cuentos. Me gustó mucho. Un placer leerte. Abrazos y feliz Navidad

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    1. Me alegra que te haya gustado, Nuria. Gracias por tus generosos comentarios y por tu tiempo.

      Un abrazo y que disfrutes estas fechas en compañía de tus seres queridos.

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    1. Muchas gracias, Guille, por tus generosos comentarios. Me alegra que te haya gustado.

      Un abrazo.

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  13. Se mezcla el pasado con el futuro que buen relato Carles, suerte. Un abrazo.

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    1. Gracias por tu generosa apreciación del relato, Ainhoa, te agradezco tu tiempo y lectura.

      Un abrazo.

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  14. Hola Carles. Debo reconocer que he tenido que leer tu relato un par de veces, y algunos fragmentos, como la escena del chamán en el poblado y el acto final, algunas más. El relato toma, efectivamente, otra dimensión con una relectura. Creo que has encriptado el mensaje deliberadamente, aunque hay algunas pistas que creo ayudan a su comprensión. A mi modo de ver, el relato comienza en un futuro lejano, en un mundo dominado por los robots en el que el ser humano se ha extinguido, o si no ha desaparecido ha sido reducido a la insignificancia. En el pasado, en el marco de ese proyecto Pavlov destinado a mejorar la raza humana, el robot descubre que el individuo por si solo, por muchas mejoras genéticas que se le implanten, no es nada sin la sociedad que lo cobija, sin el espíritu grupal al que tiende una y otra vez para compartir experiencias y emociones. Transmite sus datos a la inteligencia artificial (controlada por ese entonces por humanos) y ante la falta de respuesta hace algo inesperado, inducido seguramente por los cambios sinápticos acaecidos durante la escena del ritual, actuar individualmente aplicando los conocimientos adquiridos. El individualismo se fomenta por la élite humana en los propios humanos con el objetos de ser controlados, pero parece ocurrir lo contrario con los robots, a los que se les exige actuar grupalmente. Cuando la élite se da cuenta, anulan al robot y destruyen el poblado, temerosos de una revolución que derroque su poder. Sin embargo, esa sociedad individualista degenera precisamente por ese motivo y sucumbe aparentemente en una guerra catastrófica, sobreviviendo solo algunos androides. La RUR, superviviente al conflicto bélico, comprende que es el individualismo el que acabó con la humanidad, y recupera a 0joSDRur (muy elocuente el nombre) para ayudar a implantar el espíritu grupal en los robots y evitar su deriva al igual que en la extinta sociedad humana.
    No se si estoy haciendo una interpretación muy libre y quizás en exceso compleja del relato, o por el contrario no voy muy desencaminado. Ya me sacarás (espero) de dudas. En cualquier caso, un gran trabajo con muchos matices escondidos. Un abrazo.

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    1. Hola, Jorge, te agradezco tu extenso y generoso comentario. El que hayas tenido que releer varias veces el relato no es más que mi impericia e incapacidad para narrar con más claridad. Soy el único responsable de dicha circunstancia. Te agradezco encarecidamente que compartas tus impresiones sobre el relato, lo cual es de un valor incalculable para mí. Tu interpretación es para mí muy válida y la aprecio con igual cariño que la del resto de compañeros. Gracias por compartir tu tiempo.

      Un abrazo.

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  15. Me ha gustado mucho , Carles. La voz del androide es totalmente creíble. Un relato cargado de mensajes, de emotividad y también de algún rayo de esperanza. Buen trabajo.
    Mucha suerte en el concurso.
    Un abrazo.

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    1. Hola, Pedro, gracias por compartir tus impresiones sobre el relato y por tus generosos comentarios. Me ilusiona que te haya gustado la historia. Muchas gracias por tu tiempo.

      Un abrazo.

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  16. Me ha encantado la ley no escrita de “Cambiar las cosas para que no cambie nada”. Parece ser que los androides repiten los mismos patrones humanos! Un abrazo y mucha suerte!

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    1. Hola, Marifelita, me ilusiona que te haya gustado ese detalle tan...¿humano? Y los androides...lo parece...¿verdad?... casi de tal palo tal astilla. Muchas gracias por compartir tus impresiones y tu tiempo.

      Un abrazo.

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  17. Hola, Carles. Un relato complejo que merece una relectura. Un futuro en el que los humanos quedan relegados a la insignificancia y donde los mismos robots necesitan ajustarse los tornillos para no colaborar con los humanos.
    Un gusto leerte.
    Un abrazo

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    1. Te agradezco tu tiempo y lectura, Mírna. Ha sido mi incapacidad para narrarlo adecuadamente lo que hace el relato complejo. Gracias por compartir tus impresiones y comentarios.

      Un abrazo.

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  18. El ser humano no es nada como individuo aislado. Necesita el apoyo del colectivo para desarrollar proyectos. ¿Que sería de una historia si no pudiera ser narrada o leída por otros individuos? Simplemente que no se recordaría.
    El ser humano se supera aprendiendo y desarrollando proyectos, como este actual reto de la inteligencia artificial.
    Pero hay algo que conmueve y horroriza a la vez. No aprenderemos jamás a convivir en paz y para ello invertimos nuestra inteligencia para crear armas que nos destruyan a nosotros mismos. Una contradiccion en un mundo enfermo.
    Un relato con carga emotiva y muy sugerente.
    Un abrazo.

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    1. Te agradezco, Francisco, que compartas tus impresiones sobre la historia. Coincido contigo que el ser humano es un proyecto de la naturaleza en continua evolución, tanto en sociedad como individualmente.

      Muchas gracias por tu tiempo y lectura. Un abrazo.

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  19. Hola, Carles. Se aprecia enseguida que te apasiona el género y que lo dominas. Yo que soy un ignorante lo he encontrado interesante y entretenido, pero no podría decir nada que fuera más técnico. Le he encontrado buena sonoridad y ritmo. Un abrazo.

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    1. Hola, Isan, tengo que reconocer que me atrae mucho la ciencia ficción, aunque he leído menos de lo que me gustaría. Y nada más lejos de la realidad. Para nada domino este género. Debe ser el cuarto o quinto relato que escribo sobre cifi. Dudo mucho, Isan, que seas un ignorante al respecto, yo al menos no lo aprecio así en tus trabajos, tan diversos y de una calidad envidiable. Por otro lado me he sorprendido un poco con tus impresiones sobre el relato. Para mí, cada vez que leo mi relato encuentro más fallos. Y entre ellos que adolece de ritmo y sonoridad. Ya ves, soy incapaz de ver lo que tú bien aprecias, reitero lo anteriormente dicho: no domino nada de nada, me queda un montonazo por aprender y los relatos de todos ustedes son los mejores ejemplos a seguir para mejorar.

      Muchas gracias, Isan, por tu tiempo, tus comentarios y generosidad. Un abrazo.

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  20. ¡Hola, Carles! Me ha parecido muy interesante que tu historia esté contada desde el punto de vista de un androide. Resulta curioso leer su opinión hacia los humanos y queda plasmada la necesidad de la constante evolución que tanto caracteriza a la tecnología, además de la importancia del aprendizaje. ¿Qué estará por venir? ¿Qué pasaría si los robots pudieran aprender por sí mismo? Esto es diferente a que tengan una programación. Estas cuestiones hacen reflexionar.
    Un abrazo!

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    1. Hola, M.A, en parte quería transmitir esos detalles evolutivos y de aprendizaje que tú resaltas respecto a esos hipotéticos robots o androides del futuro. Creí que narrado en primera persona por un robot seria una buena manera de resaltar los sesgos o bloqueos cognitivos del protagonista, así como su insensibilidad emocional. Con su posterior evolucion. No estoy seguro de haberlo conseguido.

      Muchas gracias por compartir tus impresiones y tu tiempo. Un abrazo.

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  21. Hola, Carles. Nuestro robot-maestro cambió cuando la magia del chamán penetró en su interior y desde entonces sus alumnos fueron mejores. ¿Por qué se canceló el proyecto? ¿Los resultados eran peligrosos? Aún así, nuestro protagonista se uso poner en contacto con sus compañeros. La semilla de la rebelión está plantada.
    Buen trabajo, compañero. Felicidades.

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    1. Hola, Bruno. Te agradezco mucho que compartas tus impresiones sobre el relato y que resaltes las cuestiones que percibes sin respuesta en el mismo. Algo muy a tener en cuenta. Te agradezco tu tiempo y generosos comentarios.

      Un abrazo.

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  22. Hola, Carles. Cuando empecé la lectura no acababa de comprender qué demonios hacía el robot en una aldea africana, creo, y tan poco evolucionada. La magia que que exhibe el que entiendo como el chamán de la tribu tiene la culpa. Es el elemento novedoso que tú has incluido como otra característica de los humanos. Creer en cosas que no podemos ver. Lo bueno es que tú se lo atribuiste también al robot y eso lo cambió para siempre y lo hizo único. En cuanto al final, es la grabación de lo ocurrido ante el fuego y termina cuando comienza la historia, porque continuar sería entrar en bucle, como el día de la marmota.

    En cuanto a todo eso de Pavlov, R.U.R. y la frase “Cambiar las cosas para que no cambie nada”, son unos detalles francamente excelentes que le dan un enorme valor añadido al relato.
    Suerte en el reto!

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  23. Te agradezco, MJ, que resaltes ese detalle inicial, algo que debería revisar e intentar subsanar. Te agradezco encarecidamente que compartas tus impresiones sobre el relato y tu tiempo.
    Un abrazo.

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  24. Hola Carles, tu historia me parece muy interesante. Una inteligencia artificial enviada para labores educativas, de mejoramiento humano que se ve confrontada con algo que no entiende pero que se da cuenta es determinante para que sus alumnos se desarrollen mejor. Todo lo que se desencadena después es muy intrigante y uno siente lástima por el androide, porque ha vislumbrado algo trascendental y le han coartado de mala manera. El final sin embargo viene cargado con una semilla de esperanza. Me gusta la idea de que los androides o robots sean usados para cosas buenas pero como todo, siempre hay intereses ocultos que pueden torcer las buenas intenciones. Enhorabuena por tu relato, me agradó mucho. Suerte en El Tintero.

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    1. Hola, Ana, has sintetizado muy bien mi intención al escribir este relato. Me ilusiona que te haya agradado el mismo y que seas tan generosa con la historia. Muchas gracias por compartir tus impresiones y tu tiempo.

      Un abrazo.

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  25. Un relato excelente, Carles. Nunca sabremos hasta dónde podemos llegar los humanos y si el conocimiento ancestral y los nuevos métodos educativos serán compatibles.
    Un abrazo.

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  26. Muchas gracias, Josep, por palabras tan generosas hacia el relato. Ya me doy con un canto en los dientes si se logra entender la historia. Y comparto contigo q resultará muy interesante la fusión del conocimiento ancestral y las nuevas tecnologías. Te agradezco que compartas tus impresiones y tu tiempo.

    Un abrazo.

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  27. Hola Carles, un relato muy denso a mi modo de entender, con ese robot - maestro con un mensaje que al final todos entendieron
    Un abrazo y suerte en el concurso
    Puri

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    1. Muchas gracias, Puri, por compartir tus impresiones sobre la historia, tendré en cuenta el detalle de la densidad del relato para próximos trabajos. Gracias por tu tiempo y lectura.

      Un abrazo.

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  28. ¡Hola Carles! Muy buen relato. Un protagonista que parece ser un robot dedicado a la enseñanza nos cuenta los avances que hace con sus alumnos humanos. Parece que en este futuro mundo la mayoría de los ámbito están bajo el poder de los androides. Un saludo y suerte en el concurso.

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    1. Muchas gracias, Rocío, por tus generosos comentarios. Parece que la deriva tecnológica en el ámbito de la robótica tiende a ocupar los nichos laborales en los que son más productivos que el ser humano. Aún tienen que solventar el problema energético para que los dispositivos tengan más autonomía en la realización de tareas más físicas y autónomas, pero esa parece la tendencia. En cuanto a la I.A eso ya es harina de otro cstal. Muchas gracias por tu tiempo y lectura.

      Un abrazo.

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  29. Hola, Carles. Tu relato con estilo de crónica de guerra me parece muy apropiado para el tema que trata. Estos poblados ajenos al consumismo y demás vicios sociales pueden ser la solución reivindicadora de la humanidad con la ayuda de un instructor tan cualificado como tu protagonista. Yo voto que en la contienda serán ellos los que acaben ganando dando una lección evolutiva sin contaminar, que es lo que nos está echando a perder.
    Saludos y suerte. 🎄🎅🥂🖐️

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    1. Muchas gracias, Vanjav, por las impresiones que viertes sobre el relato. Coincido contigo que esos poblados del tercer mundo "abandonados de la mano de Dios" quizás, y solamente digo quizás, mantengan el espíritu de algún valor cultural propio que hace ya mucho tiempo fue olvidado por nuestras sociedades avanzadas tecnológicamente del mundo desarrollado. Aunque espero que al final no hubiera ni perdedores ni vencedores, y sin embargo ganaran todos con el cambio. Muchas gracias por tu lectura y por tu tiempo.

      Un abrazo.

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  30. Hola, Carles.
    Un interesantísimo relato para reflexionar y estar prevenido ante lo que se supone inevitable.
    Los androides irán evolucionando y, de forma paralela a la humanidad, se crearán "almas" buenas y malas. Ojalá muchas 0joSDRur para garantizar nuestro destino o, mejor dicho, evitar la profética distopía.
    Me encantó tu modo de contar y ese final abierto, para que todos podamos llevar la historia donde nuestra imaginación guste. Enhorabuena.
    Un Abrazo y Feliz Año Nuevo.

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    1. Te agradezco, José, tus generosos comentarios sobre el relato. Es de agradecer que compartas tus impresiones sobre el mismo. A mí me da la impresión que la robótica, igual que otras herramientas a lo largo de la historia, pueden hacer una función importante en el devenir de las sociedades humanas, aunque influirá mucho qué tipo de personas marcan las directrices del uso de esas herramientas o máquinas y su desarrollo. Muchas gracias por tu tiempo y lectura.

      Un abrazo.

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  31. Hola.. excelente relato en el que se demuestra el porqué el conocimiento es enemigo del statu quo... el aprendizaje, individual primero, colectivo después... parece llevar invariablemente a algún tipo de revolución, ya sea tecnológica, política o social... me ha encantado... saludos

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    1. Muchas gracias, Octavio, por tus generosos comentarios sobre el relato. Comparto contigo, y a la "Historia" de la humanidad me remito, que en muchas ocasiones privar del conocimiento a diversos grupos humanos ha sido una forma de control social y de mantenimiento del "status quo". Para bien o para mal, internet es un palo en la rueda, pues facilita compartir información y conocimiento, aunque de un tiempo para acá parece que intentan revertir de diferentes maneras el gran poder comunicativo y de conocimiento que aporta la "red". Te agradezco que compartas tus impresiones sobre la historia y tu tiempo. Que que te haya gustado el relato me alegra.

      Un abrazo.

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  32. Hola, Carles. Al margen de lo interesante del tema tratado en tu relato, a mí me ha encantado en particular el lenguaje tan sugerente y evocador que has empleado a lo largo del mismo, con unas descripciones muy logradas. Felicidades y sin duda que recibirás en breve el reconocimiento que mereces. Un abrazo!

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    1. Te agradezco mucho, Beri, tus generosos comentarios y tus buenos deseos, pero personalmente doy por buena mi participación y poder compartir este magnífico escenario que es el Tintero de Oro con todos vosotros. A esto debo añadir lo que voy aprendiendo con las aportaciones de todos vuestros trabajos. No voy a negar que si el relato es elegido por mis compañeros para algo más, pues miel sobre hojuelas y a tocar las castañuelas. Te agradezco que compartas tus impresiones y tu tiempo.

      Un abrazo.

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  33. Que delicia de relato sensorial. Al margen de los tecnicismos que te han comentado compañeros más puestos en materia que esta servidora, (entre ellos los concienzudos comentarios de los maestros Javier y Jorge, de los que aprendo y mucho), y a pesar de estar algo encriptados para mis escasos conocimientos del género, te digo Beri que lo he disfrutado y mucho. Te felicito,

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    1. Te agradezco tus generosos comentarios, Isabel, y me alegra que el relato haya dejado ese poso en la lectura. Muchas gracias por compartir tus impresiones.

      Un gran abrazo, Isabel.

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